viernes, 12 de julio de 2019

La diferencia entre nacionalista y xenófobo.

La diferencia entre Nacionalista y Xenófobo


Adolfo L. Suárez A.

Panamá














Esta mañana en mi estado de Whatsapp escribí sobre la diferencia entre Nacionalista y Xenófobo. 

Sólo que aquí lo voy a explicar mejor.

Soy y siempre he sido un nacionalista. Orgulloso de haber nacido en mi bella Panamá. Amo la historia de esta hermosa tierra en que he vivido, sus montañas, sus playas, el campo y muchas cosas que la hacen bella. 🇵🇦

Como recita Ricardo Miró en su poema Patria: 
La patria es el recuerdo... Pedazos de la vida
envueltos en jirones de amor o de dolor;
la palma rumorosa, la música sabida,
el huerto ya sin flores, sin hojas, sin verdor.

O como dice Rubén Blades en su canción Patria: 
Patria, son tantas cosas bellas
Son las paredes de un barrio
Es su esperanza morena: 
Es lo que lleva en el alma 
Todo aquel cuando se aleja
Son los mártires que gritan bandera
Bandera, bandera, bandera.

Nacionalista y Xenófobo.

Sin embargo, ser nacionalista no significa ser xenófobo, ser chauvinista, ser extremista, ser intolerante, o hasta terrorista.
Un nacionalista no necesita hablar mal u odiar a una superpotencia, entiéndase los Estados Unidos de América u otra y disfrutando del olor de los dólares en los bolsillos.
Es aquel que ama a su país con trabajo, esfuerzo, civismo, amor y orgullo de su tierra, su cultura, su historia.
Mi escuela secundaria fue en un instituto que lleva por nombre nuestra casa común: América. En ella aprendí muchas cosas y un ideal americanista.
Sin mencionar nombres. He escuchado voces de apretar las reglas a los inmigrantes en Panamá. Todos los países tenemos que establecer normas claras de entrada y de convivencia para todos aquellos que desean inmigrar y Panamá no es una excepción. Se ha mezclado, la desaceleración económica y falta de trabajo con ciertos hechos delictivos.
No obstante, atacar ofensivamente a extranjeros como discurso para ganar una popularidad, lejos de ayudar está propiciando la xenofobia en un país donde la gran mayoría de sus habitantes son hijos, nietos y bisnietos de inmigrantes que históricamente han acogido en este lugar a nacionalidades de diferentes países del Mundo.
Soy nieto de inmigrantes que vinieron con sueños y esperanza de mejores días y no lo oculto. Soy parte de ese crisol de razas que es Panamá.
Yo nuevamente lanzo ese reto de esta mañana a cada uno de quienes lean este escrito.
¿Te atreverías a negar tus antepasados por su origen o por su nacionalidad? Yo, no.
Recuerda: "tengamos mucho cuidado con lo que decimos sobre este tema." No sea que después nos arrepintamos.
Hasta aquí mi humilde opinión.

Dedicado a dos chamas inteligentes y a otros extranjeros más.

miércoles, 9 de enero de 2019

El 9 de enero de 1964 y mi regalo de Reyes Magos.

http://laestrella.com.pa/panama/nacional/audios-conversacion-entre-presidentes-chiari-johnson-10-enero-1964/24101129
El 9 de enero y mi regalo de Reyes Magos

Adolfo L. Suárez A.


Portada del Libro de Michael E. Donoghue
Borderland on the Isthmus.
Duke University Press. 2014.
Suena extraño hablar sobre los 55 años de la gesta patriótica del 9 de enero de 1964 y mi regalo del Día de los Reyes Magos. Pero, ¿qué quiero decir con esto?

En 2014, el profesor de Marquette University Michael E. Donoghue publicó un libro cuyo título es Borderland on the Isthmus: Race, Culture and the Struggle for the Canal Zone. Este libro llegó a mis manos no sólo como mi regalo de Día de Reyes, sino como un aporte bibliográfico para estudiar más sobre cómo el factor racial moldeó la cultura de los zonians y la lucha por la soberanía en la Zona del Canal.

Si es cierto, y tomando las recomendaciones del Dr. Carlos Guevara Mann, el libro está escrito desde la óptica estadounidense, al momento de revisar la bibliografía utilizada por el autor, observé la amplia lista de fuentes consultadas tanto en Panamá como en los Estados Unidos.

Hoy voy a iniciar su lectura, coincidiendo con el día en que la estoy iniciando, y así recordar las lecciones que he aprendido durante mis años de secundaría y mis clases en la Escuela de Relaciones Internacionales con la profesora Argelia Tello Burgos en Historia de Panamá y el profesor Luis Navas de Relaciones de Panamá con los Estados Unidos, respectivamente.

Es necesario recordar que la llamada Zona del Canal era un territorio que Panamá cedió para la construcción de la vía interoceánica. Sin embargo, la denominada Convención del Canal Ístmico o Tratado Hay-Bunau Varilla estableció que que esa franja era dada a perpetuidad, lo cual despertó desde el inicio, las justas reclamaciones panameñas por la soberanía nacional en ese territorio y los beneficios que la misma generaba. Aunado a esta situación, en la Zona del Canal se incrustó un gobierno local, tribunales y un sistema legal inspirado en leyes del Estado de Louisiana en suelo panameño . Y no debemos olvidar, que se estableció en la Zona del Canal, un sistema social racista que parte desde el momento en que se estableció el denominado Gold Roll and Silver Roll entre los propios trabajadores del Canal.

Los panameños no podíamos entrar a la Zona del Canal, y si entraban, eran sometidos al mal trato despectivo por parte de la policía zonian y de los civiles zonians que consideraban como suya la franja de tierra en donde ellos estaban asentados desde 1903.

Varias obras sobre este aspecto racial en la Zona del Canal se ha escrito, entre ellos los trabajos de Michael Conniff con Black Labor on a White Canal o Joaquín Beleño con Curundú, Los Forzados de Gamboa y Luna Verde. A casi veinte años de haber finalizado la transición pactada en el Tratado del Canal de Panamá, documento que con el Tratado concerniente al Funcionamiento y Neutralidad Permanente conformaban los Tratados del Canal de Panamá o Tratados Torrijos-Carter, surgen muchas historias y recuerdos de personas que vivieron esos años fluyen en conversaciones sobre este tema. Una anécdota que nunca he olvidado fue aquella narrada por una amiga de años, Tatiana Navarrete, quien me narró la experiencia de una compañera de trabajo que vivó ese sistema racista establecido en la Zona del Canal durante su niñez, y que siempre soñaba con ver a un presidente negro en la Casa Blanca, hasta el día que se le presentó la oportunidad de servir el café al presidente de los Estados Unidos de América, Barack Obama, en medio de la pasada Cumbre de las Américas de marzo de 2015 en nuestro país, y así narrarle algunas de esas experiencias de su niñez en la Zona del Canal. Esa es solo una historia de muchas y así encontraremos muchas más historias sobre esta situación.

Presidente Roberto Francisco Chiari
con la bandera nacional desgarrada
solo unas horas antes.
Al momento de escribir este artículo, era un jueves 9 de enero de 1964, y ya habían caído las primeras víctimas de la represión contra todos los manifestantes que estaban indignados por el trato bochornoso que se le había dado a los muchachos del Instituto Nacional y a la bandera que había sido ultrajada por la turba zonian de estudiantes acompañados de sus padres y la policía zonian, Otros panameños protestaban frente al Palacio de las Garzas solicitando la acción del gobierno liderado por el presidente panameño Roberto Francisco Chiari, quienes al día siguiente, decidieron la ruptura de relaciones diplomáticas con el gobierno de los Estados Unidos. 

Es necesario recordar que los hechos del 9 de enero se prolongaron hasta el día 11 de enero y que el día 12 se llevó a cabo los funerales de los mártires de esos días. La misa en la Catedral, hoy Basílica Santa María la Antigua fue celebrada por quien sería después Arzobispo de Panamá Monseñor Marcos Gregorio McGrath.

Como lo manifestó en el especial de 2014 de TVN, Adolfo Ahumada, quien fue negociador de los Tratados del Canal de Panamá de 1977, "con el 9 de enero hubo un antes y un después en la historia panameña", hoy toda la Zona del Canal está dando beneficios no solo económicos al país y hemos demostrado que lo hemos administrado con eficiencia para ejemplo del país y el mundo. 

Hoy 9 de enero de 2019, 55 años después de esta gesta, en la cual, unos doscientos estudiantes graduandos del Instituto Nacional caminaron hacia el Balboa High School para hacer cumplir el Acuerdo de las Banderas de 1962, solo queda honrar a esos mártires y darles las gracias porque no fue inútil su sacrificio por la recuperación de nuestra soberanía en una franja de tierra en donde nuestra bella Panamá abrió sus entrañas para unir a los dos grandes océanos y así convertirse en el corazón del universo. Este es mi pequeño aporte para que las futuras generaciones no olviden su historia.

Foto histórica tomada por el fotógrafo Emilio Gastelú.
Aprovecho la oportunidad para que todos los panameños de buen corazón solicitemos que se le de al fotógrafo Emilio Gastelú, aquel que tomó la histórica foto de los muchachos con la bandera en la cerca, reciba su anhelada ciudadanía panameña.

Mientras tanto, yo disfrutaré de la lectura de mi regalo del Día de Reyes.

domingo, 14 de octubre de 2018

A 50 años del golpe de Estado de 1968. Breve reflexión en torno a esta fecha.

A 50 años del golpe de Estado de 1968. Breve reflexión en torno a esta fecha.


Adolfo L. Suárez A.

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Caricatura Peña Morán. La Estrella de Panamá. Opinión. 2 de octubre de 2018
El pasado jueves 11 de octubre, llegamos a los 50 años de aquel viernes 11 de octubre de 1968, día en que la Guardia Nacional derrocó al Dr. Arnulfo Arias Madrid, quien solo tenía once días de haber tomado posesión del cargo. En la noche de ese día, un gobierno que había ganado de forma legítima las elecciones de ese año y contaba con gran apoyo popular fue desplazado del poder para dar inició a una larga dictadura militar que duró veintiún años, dos meses y nueve días.

Si es cierto, la clase política de ese momento estaba en un estado de descomposición abierta por las constantes pugnas por el poder, además de otros factores como la desigualdad existente en la sociedad panameña, el auge de la lucha nacionalista tras los sucesos del 9 de enero de 1964, los intereses geopolíticos existentes en esos años y el papel de garante del orden que jugaba la Guardia Nacional desde que participó en los anteriores derrocamientos del Dr. Arnulfo Arias Madrid en 1941 y 1951, respectivamente; el golpe de Estado, lejos de solucionar esos problemas, lo que trajo fue una pugna interna por el control del poder entre sus miembros, la cual se saldaría en diciembre de 1969 con la consolidación de Omar Torrijos Herrera como líder. Tampoco podemos olvidar, las detenciones de todo quien se les opusiera, así como las violaciones a los derechos humanos y los desaparecidos, muchos de los cuales aún nadie sabe ni dice dónde están. Una Constitución que subordinaba todo al Ejecutivo y convertía a Torrijos en su artículo 277 como Jefe de Gobierno y "Líder Máximo de la Revolución". 

Ya han pasado 50 años de aquella fecha en la que surgió una dictadura militar que, con los diferentes personajes y etapas, la dirigieron, representó un periodo la mayoría de los panameños no queremos que vuelva. Sin embargo, esta fecha debe llevarnos a reflexionar acerca de la Panamá en la que estamos. Hay quienes comparan la actual situación política con la de 1968. Hay similitudes y diferencias. No existe un cuerpo armado, hay una población más educada, la existencia de más medios informativos tanto formales como informales, entre otras más. No obstante, el comportamiento de muchos miembros de la actual clase política cuyo comportamiento está siendo señalado constantemente por sus actos y el deseo de llevar a cabo reformas profundas a la actual Constitución o la creación de una nueva surgida de una Asamblea Constituyente, nos debe llevar a todos los panameños a no repetir los mismos errores que se cometieron en ese año.

Junta Militar de Gobierno. Presidente Coronel José María Pinilla (izquierda) y Vicepresidente Coronel Bolívar Urrutia. Foto tomada de Portal Portal Crítica.

Es necesario que la historia de lo ocurrido en esos días sea contada y analizada para que no volvamos a repetir un golpe de Estado en nuestro país. Una prueba fue la unanimidad en torno a no repetir un golpe de estado que escuche de parte de todos los participantes del programa Debate Abierto Dominical de RPC-TV, en donde sus participantes unánimemente expresaron este punto. No todo está perdido y siempre que la semilla de la esperanza se mantenga viva, estaremos seguros que mejores días tendrá nuestro país.

Prometo un análisis más profundo en los próximos días.

domingo, 17 de junio de 2018

Sube la marea: a horas de salir a jugar nuestro primer mundial.

Adolfo L. Suárez A.


Foto oficial de la Selección de Panamá en su campamento en Saransk, Rusia.


Hoy no vengo a hablar de política o de Relaciones Internacionales. 



Solo quiero compartir estas fotos y este vídeo de Copa Airlines para dar ánimo a mi país y a mi selección. 
Foto de la selección a su salida del Aeropuerto Internacional de Tocumen.

Ya logramos llegar al Mundial. 

Y ahora a jugar y ganar.


Adolfo L. Suárez A.

domingo, 8 de octubre de 2017

Viernes y Martes: mi humilde opinión del juego y lo que viene.


Adolfo L. Suárez A.


Selección de Panamá. Román Torres.
Acerca del juego de anoche y lo que viene para Panamá el día martes, yo pienso que es hora de decir lo que pienso.

Un amigo escribió que desde que él ve los Mundiales de Fútbol desde México 1986, ha soñado con ver a Panamá en una cita mundialista y considera que la selección debe afrontar la realidad. Por mi edad, yo veo los Mundiales de Fútbol desde que tenía nueve años con el Mundial de Argentina 1978 y durante mi vida, he leído, visto, escuchado e intercambiado sobre el tema del fútbol.. He visto diferentes campeonatos de fútbol, unos con alegría y otros con tristeza. Creo que es hora que comience a expresar lo que siento.

La derrota ante los Estados Unidos era algo que estaba dentro del libreto. Panamá no es todavía un grande de CONCACAF. México es grande en CONCACAF ahora, pero les recuerdo que Alemania apabulló en Argentina 78 con un 6-0 a los aztecas. Estados Unidos fue apabullado 6-1 por Argentina en Uruguay 1930, y 5-1 por la desaparecida Checoslovaquia en Italia 1990. Costa Rica salió con 5-2 frente a Brasil en Corea-Japón 2002. Incluso, mi favorito Brasil, y el 1-7 del 2014, conocido hoy como el Mineirao. No podemos negar que el equipo completo lució mal en su rendimiento. Para colmo, el director técnico de la selección panameña, Hernán Darío "Bolillo" Gómez sentó a Fidel Escobar para jugar con experiencia en la parte defensiva, pero el tiro le salió por la culata. Tan mal fue la actuación de la defensa panameña que perseguir a Christian Pulisic parecía una parodia de la cómica de Speedy Gonzalez y Silvestre.

En cuanto al incidente ocurrido después del juego del viernes que terminó con la derrota de Panamá ante los Estados Unidos en Orlando, Florida, en donde hubo un intercambio brusco entre Felipe Baloy y el periodista Alexánder Da Silva, inicio expresando que no justifico la acción tomada por Felipe Baloy en el trato dado al periodista por sus críticas. No se puede negar que en él recayó la culpa por dos de los cuatro goles de ayer. Ahora, él no es el único culpable y vamos a decirlo con honestidad, los once jugaron mal. Ahora, el cambio que efectuó el director técnico Gómez, al sacar a Edgar Bárcenas por Armando Cooper y las atajadas del portero Jaime Penedo en el partido logró contener lo que habría sido un saco más grande de goles.

Hoy es domingo y ya ha pasado mucha agua debajo del puente. No justifico la goleada dada por Estados Unidos a Panamá; pero si el equipo, los directivos y nosotros los fanáticos panameños seguimos hoy, mañana y el martes con este llanto por algo que no podemos borrar y sabiendo que aún tenemos una oportunidad, entonces si debemos decir que no merecemos ir a un Mundial. Si tú me quieres decir soñador, bueno, ese no es mi asunto. Yo soy de la opinión que hay que pensar en positivo. 

Este martes, nosotros no seremos los únicos que tienen a equipo jugando por su destino en esta eliminatoria. En Sudamérica y en este orden de puntos: Colombia, Perú, Argentina y Paraguay tendrán que salir a buscar su destino. Nosotros y los hondureños también vamos a buscar nuestro destino. Además, ellos, los catrachos la tienen peor en el papel, en comparación a nuestro equipo. Desde que la eliminatoria arrancó, todos los analistas de futbol nacionales e internacionales, incluyendo hasta el que nos anda haciendo bullying en ESPN David Faitelson, nos ponía como candidato para el repechaje. Tenemos que unirnos todos ya y dejar de llorar por lo que pasó el viernes en Orlando.

En este momento yo tengo una pregunta para ti, quien está leyendo esto en el blog y para que recordemos nuestra historia y lo que siempre hemos sido: ¿Quién dijo que el Canal de Panamá lo recuperamos en solo cuestión de horas? Panamá nunca la tuvo fácil. La lucha por la recuperación de la vía interoceánica tomo el esfuerzo de generaciones de panameños que lucharon por ese sueño, ser soberanos en la Zona del Canal y que nuestra bandera ondeara soberana en ese territorio. La lucha de generaciones llegó a su punto más duro con los sucesos del 9, 10 y 11 de enero de 1964. La misma alcanzó un triunfo con la firma de los Tratados del Canal de Panamá o Tratados Torrijos-Carter en 1977, y el 31 de diciembre de 1999, logramos alcanzar la victoria.

Del mismo modo, el fútbol, guardando las comparaciones, no ha la tenido fácil. Somos un país en vía de ser un país futbolizado, y todavía "nos falta calle", como lo dice el refrán.

Una recomendación, y si alguien eres amigo de un jugador de la selección o de un directivo de FEPAFUT o periodista deportivo, dígale que este panameño que no está dispuesto a rendirse, les envía un consejo: "olvida lo del viernes y el martes, sal a ganar. Olvida el empate de Costa Rica-Honduras". Con el respeto de los ticos, ellos por el orgullo de ser uno de los mejores ocho de 2014 no nos van a regalar nada. Hay que ganar para asegurar el repechaje con Australia, que es quien aparenta según los resultados. Y no estaremos solos en los repechajes, Nueva Zelanda espera al quinto de Sudamérica.

El martes, es ganar o ganar. No hay más opciones y tenemos que apoyarnos mutuamente ara llegar al primer mundial de Panamá. Ese es nuestro camino y no hay vuelta. Tenemos que asegurar la ida al repechaje, después habrá tiempo de pensar en lo que hay que hacer frente al rival. Ahora es Costa Rica en casa.

Por mi parte solo queda decir: yo no voy a renunciar al sueño de ver a mi país en un Mundial de Fútbol. ¿Y tú?


Panamá

jueves, 8 de diciembre de 2016

Feliz Día de las Madres.

La Inmaculada Concepción, de El Greco - 1608.
Feliz Día de las Madres y un disculpa.

Después de tantas semanas de no escribir en el blog con un año con tantos temas interesantes, quiero pedir disculpas a todos mis amigos. Antes de terminar este año, publicaré algo para compartir.


Feliz Día de las Madres

Aprovecho esta oportunidad para desear a todas mis lectores femeninas, en especial a las de mi familia, un feliz día. 
Para nosotros en Panamá, este día coincide con un valor religioso por celebrarse esta fecha con la celebración de la Inmaculada Concepción de María.

Para todas las mamás: Feliz Día...


Adolfo L. Suárez A.
Mis Temas de Debates.

jueves, 31 de diciembre de 2015

La Separación de Panamá de Colombia: una visión geopolítica (Décima y última parte)

La Separación de Panamá de Colombia: una visión geopolítica (Décima y última parte)


Adolfo L. Suárez A.


Durante estas entregas, hemos visto, el tema de la Separación de Panamá de Colombia desde un punto de vista de la geopolítica de la época y cómo la misma también estaba inmersa en la configuración de un Estado panameño en distintos momentos de nuestra historia departamental o de Unión a Colombia.

Los Próceres de la Independencia de 1903.

Es importante destacar, y siempre he sido de esta opinión, que no podemos negar que siempre hubo la existencia de un sentimiento nacional a lo largo de nuestra historia. Sin embargo, el mismo no estaba totalmente desarrollado en comparación a otros Estados latinoamericanos, y existían otros factores tales como la poca población del territorio del Istmo, el apoyo inicial de elementos de la clase criolla a la Corona Española durante la lucha independentista, la presencia del Virrey en suelo panameño por un periodo de tiempo, entre otros más, cuando Panamá alcanzó su independencia el 28 de noviembre de 1821, lo que la motivó a unirse a la República de Colombia de Simón Bolívar (la Gran Colombia).

Durante los casi ochenta y dos años de unión a Colombia se llevaron a cabo y por distintas razones tres intentos de separación entre 1830 a 1840. El primero como respuesta a la reunión del proyecto bolivariano con José Domingo Espinar; el segundo que fue motivado por intereses económicos y caudillistas; y el tercero, de más duración que configuró la primera república en suelo panameño en trece meses de existencia.

Después vimos el proyecto federalista de Justo Arosemena, que planteó la autonomía del Istmo dentro de un régimen federal, el cual duró treinta años. En 1862, Santiago de la Guardia llevó a cabo otro movimiento que intentó separa el Istmo, pero que murió con su propia muerte en combate.

Con la caída del federalismo y el fracaso del Canal Francés, sumado a la constante inestabilidad política colombiana (en especial la Guerra de los Mil Días) y el rechazo al Tratado Herrán-Hay en agosto de 1903; los istmeños se convencieron definitivamente de la necesidad de separar al Istmo de la República de Colombia y dirigir su propio destino.
Antes de analizar esta última parte del tema, hay que recordar que hay autores que señalan la creación de la República de Panamá como un invento de intereses económicos foráneos que dieron paso a la llamada Leyenda Negra frente a quienes señalan la separación de Panamá de Colombia como la respuesta a la anhelada libre autodeterminación de dirigir su gobierno y sus leyes. Desde el primer momento, autores como Oscar Terán y el propio Belisario Porras escribieron su rechazo a la separación de Panamá de Colombia. Posteriormente, autores colombianos, de los cuales destaca Eduardo Lemaitré y su libro Panamá y su Separación de Colombia contribuyeron a dar énfasis investigativo a esta llamada Leyenda Negra. Más reciente, el historiador Olmedo Beluche con su libro La Verdadera Historia de la Separación de 1903: reflexiones en torno al Centenario, y el investigador Ovidio Díaz con su libro El país creado por Wall Street: La historia prohibida de Panamá y su Canal, ampliaron el tema de la Leyenda Negra.

Si tenemos a defensores la tesis de la Leyenda Negra, también existen autores panameños que analizaron el papel de los próceres de la independencia frente al curso de los acontecimientos y defienden sus actuaciones frente a los acontecimientos de noviembre de 1903. El más reciente de estos estudios fue publicado en 2014 por Julio Ernesto Linares Franco, con el título La Leyenda Negra: Engaño y Ficción.


Si es cierto, y como hemos visto, hay factores geopolíticos y grandes intereses económicos que intervinieron en el tema de nuestra separación con Colombia con el propósito de lograr que el paso entre los mares, como David McCullough tituló a su libro en 1977, fuera construido por el Istmo de Panamá; no se puede soslayar ese anhelado deseo de autodeterminación de los panameños presente en distintas generaciones desde el siglo XIX.

Ahora en el tema, el rechazo del Tratado Herrán-Hay de agosto de 1903 por parte del Senado colombiano, inició un punto de no retorno. José Agustín Arango desde mayo de 1903 reunió primero a un grupo de personas cercanas: sus hijos Ricardo, Belisario y José Agustín, sus yernos Samuel Lewis, Raúl Orillac y Ernesto Lefevre y a l amigo de la familia Carlos Constantino Arosemena. Al grupo se unió, J.R. Beers, Agente de carga de la Compañía del Ferrocarril de Panamá. Posteriormente, reunió a un grupo de notables ciudadanos miembros del Partido Conservador en Panamá y logró que todos se unieran para crear un plan secesionista en el Istmo de Panamá y así lograr la negociación de un tratado para lograr el anhelado proyecto de un canal por Panamá. Entre estos panameños tenemos a Manuel Amador Guerrero, Manuel Espinosa Batista, Ricardo y Tomás Arias, Federico Boyd, y otros que crearon la Junta Separatista y buscaron la forma de alcanzar un apoyo de los Estados Unidos a la causa independentista, aprovechando los vínculos que Arango y Amador tenían con la Compañía del Ferrocarril de Panamá. De esta iniciativa surgió el viaje de Amador Guerrero a los Estados Unidos para lograr una entrevista con William Nelson Cromwell, la cual no se pudo lograr, ante el rechazo de este último, momentos en donde reaparecería la figura de Philippe Bunau Varilla quien se comprometió con la causa con algunas condiciones.

Caricatura del presidente estadounidense Theodore Roosevelt.
Mientras esto ocurría, el Secretario de Estado John Hay le escribió al presidente Theodore Roosevelt el siguiente texto: "Es probable que haya una rebelión en el Istmo de Panamá en contra del ignorante y desatinado gobierno de Bogotá...Nuestra intervención no debe ser improvisada ni para beneficio de Bogotá como hasta ahora ha sido. Yo me aventuro a sugerirle que lo piense por dos o tres semanas . Dos días después, el Presidente contestó: Apruebo totalmente la idea. . .No hagamos nada...ahora hay dos alternativas. La primera decidirse por Nicaragua. La segunda, intervenir cuando sea necesario...en alguna forma, para asegurar la ruta por Panamá sin tener que tratar más con los tontos y homicidas corruptores de Bogotá..." 1 Había la tercera alternativa de alcanzar una política conciliatoria con Colombia, pero esta alternativa no era compatible con el carácter del propio presidente Roosevelt.

En agosto de 1903, el profesor de Derecho Internacional y Diplomacia de la Universidad de Columbia John Bassett Moore, le escribió en agosto de 1903 al presidente Roosevelt un memoradum que le sirvió de justificación legal para presionar a Colombia y que le llegó en el momento más oportuno. Moore propuso no tomar el Istmo por la fuerza, pero sugirió que el viejo tratado de 1846 (el Tratado Mallarino-Bidlack) obligaba a Colombia a permitir a los Estados Unidos la construcción del Canal por Panamá, dentro de sus artículos. Además, los Estados Unidos por más de 50 años le había asegurado a Colobia su soberanía sobre el Istmo con el mutuo propósito de mantener un tránsito franco y expedito en dicho territorio. Con esta doctrina formulada por Moore sin ningún interés político, Roosevelt le envió el memorandum a Hay con la opinión de que la construcción de una vía interoceánica por Panamá era un derecho y se mostraba a favor de la recomendación de Moore.

Mientras tanto, de la reunión entre Amador y Bunau Varilla y el compromiso entre ambos, el grupo de ciudadanos conservadores inició los acercamientos con los líderes liberales y con el General Esteban Huertas, jefe del Ejército colombiano en Panamá; acordándose llevar a cabo la secesión el 28 de noviembre de 1903 originalmente. Bunau Varilla sostuvo diversas reuniones con Roosevelt y Hay. 

El gobernador del Istmo, José de Obaldía, quien también simpatizaba con el movimiento inventó una supuesta invasión de nicaragüenses en el área de Bocas del Toro con el propósito de burlar a las autoridades, las cuales respondieron enviando al Batallón Tiradores dirigidos por el General Tovar desde Cartagena a Colón. Esto llevó a la Junta a precipitar los hechos al día 3 de noviembre. Ya advertidos de esta movida, los Estados Unidos envió a los barcos de guerra Dixie y Nashville a Colón con la orden de impedir el desembarco y traslado de tropas colombianas de Colón a Panamá. Por otra parte, otros barcos de guerra de los Estados Unidos fueron enviados a Panamá.

Los próceres separatistas de la ciudad de Colón.
Como ya es sabido, el Superintendente del Ferrocarril, Coronel James Shaler, solo envió al General Tovar y los oficiales colombianos por tren, los cuales fueron arrestados por Huertas y los liberales dirigidos por Domingo Díaz, Carlos A. Mendoza, Eusebio A. Morales y Guillermo Andreve convocaron al pueblo dar apoyo al movimiento y así consolidar la independencia que fue aprobada por el Consejo Municipal de la Ciudad de Panamá., dando nacimiento a la República de Panamá. El día 5, los miembros de la Junta Separatista de Colón lograron que las tropas colombianas regresaran a Colombia tras sobornarlos y pagarles salarios pendientes, consolidando a la nueva república. Sin embargo, la independencia plena solo duró hasta la noche del 18 de noviembre, fecha en que el Representante de Panamá ante el gobierno de Washington, el ingeniero Bunau Varilla, firmara con el Secretario de Estado John Hay, el funesto Tratado Hay-Bunau Varilla, el que comprometió la soberanía de la naciente república por muchos años.

En fin, Roosevelt y Hay apoyaron el movimiento y lograron la construcción de la vía interoceánica y su dominio y los panameños alcanzamos la anhelada independencia, pero a un alto precio. Bunau Varilla y los inversionistas franceses y de Wall Street lograron recuperar su dinero y se desligaron del destino de la nueva república. 

Notas
1. Gerstle Mack. La Tierra Dividida. Panamá, Editorial Universitaria, 1993.